Crónica de la XXIII regata Paula de Vaurien

Viento fuerte, participación, muchos vuelcos, colisiones, emoción hasta la última manga ¿que más se puede pedir? ¿Diversión, aprendizaje? pues también hubo. Todo eso y más fue la clásica regata cinera de Vaurien (la Paula) de este año. Os contamos la crónica a continuación.

Día 1 (sábado 26)

Al llegar, el pantano nos saludaba con un viento sur fuerte, que traía muchos borreguitos: el día prometía fuertes emociones. Muy bien la participación, con 7 barquitos (5 cedidos por la organización y 2 de particulares). Inscripción, reunión de patrones, sorteo de barcos CINA, aparejado, etc. «Ups, qué miedito! ¿seguro que vamos a salir? Cada vez sube más…».

El comité (Javier ayudado por David) decidió esperar prudentemente a que amainara un poco y aprovechamos para comer antes de salir, en un esfuerzo por salvar el día de navegación. Mientras, los borreguitos seguían, pero por momentos ya no parecían tan amenazadores. Bueno, pues ya no cabía retrasar lo inevitable y… «¡al agua! agarrarse fuerte…»

Los borreguitos, realmente, no se habían ido y nos esperaban agazapados a que saliéramos, por si encontraban algún Vaurien despistado en su camino… y los encontraron. Varias veces, pues durante el fin de semana terminarían volcando 5 de los 7 Vaurien participantes: «al menos, el agua no está fria», decían los volcados. Y claro, con ese viento, antes de comenzar la regata, los Vaurien planeaban sin esfuerzo de través a través, a poco que se cazasen escotas «qué vértigo, ¿cómo se para estoooo?»

Y por fin, el comité pudo dar la primera salida: «5,4,1,0, bandera de salida y allá que vamos!». El barco de Pablo/Carlos disparó primero y se llevó la primera manga con autoridad desde el inicio. Incluso sacó valientemente el spi.

La segunda manga fue similar. El viento fue rolando de sur a oeste (muy raro en el pantano) lo que dificultó enormemente la labor de los jueces recolocando el campo de regatas. Pocas viradas se pudieron ver. Pablo/Carlos volvieron a ganar y ampliaban así su ventaja sobre el resto. Esta vez ya se vieron más spis.

En la tercera manga se imponían Alberto/Rafa gracias a una buena salida llevándose la manga y manteniendo vivo el duelo en la cabeza de la clasificación. Manga corta, viento suave y prácticamente de un solo bordo. Y con ello terminó el día, que se estiró lo que se pudo.

A la llegada a tierra nos recibió un numeroso público que se agolpaba sentado en las orillas del pantano a modo de gradas, mientras de fondo sonaba una música de piano acompañada de cantos. «Anda, ¿y esto qué es? ¿tenemos afición? ¿somos famosos?». Bueno, a lo mejor no era por nosotros, sino porque justo entonces comenzaba un espectáculo musical de «piano du lac«. Muy chulo, con un punto surrealista. ¿Habéis navegado en Vaurien mientras un pedalo-piano os toca música? ¡Pues nosotros sí! Después, la mayoría de las tripulaciones nos repartimos entre cenar en El Picachuelo y tomar algo al bar. Qué rico todo y qué buena noche se quedó.

Día 2 (domingo 27)

El segundo día se presentó de lujo. Viento sur medio-fuerte ideal para el Vaurien, con borregos intermitentes, lo que permitió al comité montar un campo de regatas perfecto y permitió ver por fin muchos cruces, estrategia, aprovechamiento de roles y bordos favorecidos, etc. ¡Estupendo! «al agua rápido, que hay que aprovechar», nos indicaba el comité.

El Vaurien de Irene/Gema remoloneaba en la rampa, aunque era el que más animaba y empujaba a los Vaurien dubitativos a echarse al agua (lo de empujar, de forma literal) porque según ellas, era «ahora o nunca». Y es que, aunque ya estábamos más endurecidos por el día anterior, aún soplaba.

La primera manga del día la volvieron a dominar Pablo/Carlos, imponiéndose con una punta de velocidad sobre el resto.

La segunda manga fue diferente, y en ella el Vaurien de Alberto/Rafa acertaba con los bordos y conseguía sacar una amplia ventaja al resto de la flota. Sin embargo, la manga estuvo marcada por un abordaje en medio de la ceñida, de los que no dejaron huellas de frenada en el agua. Los daños sufridos obligaron al barco de Fredy/Fran a retirarse «ay, qué dolor ver el agujero que se le quedó al pobrecito Vaurien». Bueno, los accidentes pasan y nos recuerdan la necesidad de mantener la vigilancia constante mirando continuamente detrás de la vela.

Y así se llegaba a la sexta y última manga de la prueba, con el trofeo en juego. ¡El que ganara la última, se llevaba la regata! Se adelantó pronto Alberto/Rafa en su particular match-race que mantenía con Pablo/Carlos y a partir de ahí se dedicó a controlar la situación para amarrar la victoria en la general.

Post-Regata

Tras desaparejar, entrega de trofeos, posado para las fotos, etc. Los campeones Alberto/Rafa recibieron la enhorabuena. Tras ellos, también recibieron trofeo como segundos Pablo/Carlos.

Y después, todos a compartir las anécdotas tomándonos cerveza/refresco en la terraza del bar Social del pueblo. Por las distintas mesas se escuchaban comentarios como «pues nosotros hemos volcado varias veces», «anda, que si no me equivoco de boya», «si hubiese ido por el otro bordo» o «si no hubiera volcado…» que se mezclaban con «pues yo iba sin cañín, haciendo banda con un cabito» o incluso «es que seguimos al Vaurien equivocado», etc. La tripulación de Cristina/Carmen se felicitaba por terminar el fin de semana secas y nos recordaban orgullosas que no habían volcado, a pesar de ser un Vaurien de solo-alumnos, mientras Marisol proponía utilizar como baliza una boya-palmera-dispensador de cerveza.

Pues eso. Mucha diversión y aprendizaje. ¡Nos vemos en la siguiente!

Clasificación