TALLER DE UNIFICACION DE LIGERA 2015
Por la mejora de los métodos de enseñanza
(Texto: Begoña de Miguel)
Durante varios días de los meses de abril y mayo pasados un nutrido grupo de monitores se ha animado a atender el “Taller de unificación de criterios de enseñanza para vela ligera” cuyo fin ha sido mejorar la estructura de los cursos, la metodología de enseñanza, las prácticas y la seguridad en el agua.
Las conclusiones han sido verdaderamente interesantes y todos los monitores que hemos atendido el taller tenemos muchas ganas de poner en práctica lo acordado y compartirlo con el resto de compañeros de CINA.
Durante los días 15 y 22 de abril y el 6 de mayo un nutrido grupo de monitores se ha animado a atender el “Taller de unificación de criterios de enseñanza para vela ligera”.
El taller, dividido en dos partes -una teórica y otra práctica- se ha desarrollado en la sede de la Federación Madrileña de Vela y en el pantano de Valmayor.
Gracias a un análisis previo de la base teórica de los manuales de enseñanza del CINA llevado a cabo por Juan de Arana y contrastado con su experiencia práctica como responsable desde hace ya varios años del curso de monitores, se debatió la mejora de la estructura de los cursos, tanto en lo relativo a los conocimientos a adquirir como a la metodología a utilizar –en tierra y en el agua- y la mejor manera de realizar las prácticas.
Los debates, aunque no exentos de polémica, se han desarrollado de manera ágil y han permitido llegar a acuerdos y conclusiones que todos estamos seguros facilitarán la labor del monitor, mejorarán el aprendizaje del alumno y minimizarán riesgos.
La evaluación de los alumnos a debate
Se abordó también la posibilidad de cambiar la manera de evaluar al alumno, retomando la tradicional “cartilla del alumno” del CINA pero mejorada y planteando la posibilidad de que sea éste el que al finalizar cada día de navegación tenga la responsabilidad de solicitar a su monitor la evaluación de las distintas maniobras aprendidas ese día. El objetivo de tal medida es implicar al alumno en su propio aprendizaje.
El monitor, por su parte, llevará preparada una planilla con las maniobras que correspondan a ese día y los nombres de los distintos alumnos, herramienta que creemos facilitará el seguimiento y evaluación de los mismos, sobre todo cuando se trata de los niveles de perfeccionamiento y autonomía en los que el contacto visual con los alumnos es menos continuado.
En las reuniones se acordó probar durante los cursos de Valmayor que comienzan esta primavera si este método de evaluación es adecuado y si puede ayudar a conocer de manera más clara si el alumno ha alcanzado la pericia necesaria para pasar al siguiente nivel.
Fin de semana de prácticas en Valmayor
Las prácticas de Valmayor se han centrado en que los monitores asistentes al taller reaprendiéramos la manera de enseñar de forma práctica aquellas maniobras acordadas en las sesiones teóricas, al considerar que realizadas de esta nueva manera ayudarán a mejorar el aprendizaje de los alumnos.
Esperamos que estas nuevas prácticas se extiendan poco a poco al resto de monitores para que la forma de enseñar sea homogénea. Y para ello dispondremos en breve de la guía del monitor que requiere de un grupo de voluntarios para poder corregir y terminar el borrador preparado por Juan y debatido en este taller.
Más talleres para el futuro
Han quedado otros temas por desarrollar y mejorar, como el libro de topós, la mejor manera de decidir quién puede acceder a un curso de crucero desde vela ligera y otros tantos que esperamos sean motivo para dar continuidad a estos talleres en el futuro.
La oportunidad de estar siempre mejorando, de crear un vínculo entre monitores y de animar a los que llevamos tiempo sin enseñar a retomar de manera segura nuestra actividad docente son otros tantos motivos a tener en cuenta para pensar que este tipo de iniciativa es realmente interesante.
Cervecitas, charla y fin de fiesta
Como es tradicional en el CINA, las coca-colas, cervecitas y los aperitivos no faltaron ni en el aula ni después de finalizar las reuniones de Madrid y las prácticas de Valmayor.
Bromas, comentarios, re-encuentros y nuevos amigos han hecho de estos días de debate y aprendizaje un tiempo agradable y divertido. Como para repetir.
Gracias Juan por la iniciativa y por tu dedicación.
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